Primero de todo quiero explicar que la función de este mensaje es informar a otros viajeros, mediante mi experiencia en un reciente viaje a Egipto, ya que puede ser de utilidad para evitar en la medida de lo posible los problemas que a nosotros nos han sucedido con la mayorista o al menos vayan avisados:
A nuestra llegada al aeropuerto de Aswan nos estaban esperando los representantes de la agencia organizadora del viaje en Egipto (Image Tours) para la tramitación del visado, que consiste literalmente en pegarte en el pasaporte la pegatina del visado, por lo que te cobran 34 €. Nosotros en cambio nos dirigimos a las ventanillas de control de documentación para preguntar donde podíamos obtenerlo y nos indicaron que en la ventanilla del banco, pero al preguntar allí nos decían que no, que no sabían nada, así que continuamos preguntando al personal del aeropuerto, se miraban unos a otros y nadie sabia nada o nos decían que esperásemos a que viniese el responsable pero no venía nadie. Estuvimos a punto de ceder y solicitárselo a nuestro guía, pero finalmente apareció un señor con los visados, por los que nos cobró ¡10 €! (el mismo nos pegó el visado en el pasaporte).
Una vez llegamos al barco lo primero que hicieron fue sentarnos en diferentes mesas formando pequeños grupos para vendernos las excursiones opcionales (en nuestro caso prácticamente todo el grupo había contratado el paquete de excursiones básico de 114 €), explicándonos que para el día siguiente las visitas incluidas nos llevarían únicamente una hora (visita a la Alta Presa y al Obelisco Inacabado, las cuales resultan de escaso interés si lo comparamos con el templo de Philae, acerca del cual no hicieron ni mención), así que para llenar el tiempo libre podíamos hacer las excursiones OPCIONALES a Abu Simbel y visitar un poblado Nubio al precio de 95 € y 35 € respectivamente, pero como nuestra idea era realizar las excursiones por libre le dijimos que estábamos cansados y que de momento no queríamos coger ninguna (la discreción fue absoluta). Después de cenar salimos a dar una vuelta para contratar el viaje a Abu Simbel y aunque las recomendaciones de varias guías indican que es más económico contratarlas en hoteles pequeños, decidimos contratarla en un hotel de lujo para asegurarnos de que tenían los seguros y todo era legal. Aun así nos costó solo 10 € por persona. Cuando nos disponíamos a salir del barco sobre las tres de la mañana (a las cuatro de la mañana sale un convoy policial en el que viajan tanto los viajes organizados como los que lo contratan por libre, con las mismas medidas de seguridad) nos estaba esperando uno de los guías (Sr. Manduh) el cual nos dijo que le teníamos que firmar un papel que había escrito a mano, del cual nos decía que era un documento oficial, sin embargo no tenía una copia para nosotros ni se existía el sello de ningún organismo oficial; era simplemente un folio escrito a mano. Por supuesto nos negamos y cuando hicimos el gesto de salir del barco nos empezó a gritar que no estábamos en nuestro país y que nos olvidásemos de las leyes españolas, que aquí no se podía andar por la calle por la noche ni salir del barco y que si lo hacíamos iba a llamar a la policía. Aún así salimos del barco y cuando íbamos caminando nos pareció que alguien nos seguía por el otro lado de la calle pero no le dimos importancia (no nos imaginábamos lo que iba a pasar) y continuamos hasta el hotel donde nos esperaba la furgoneta que nos tenía que llevar a Abu Simbel. Una vez dentro el conductor recibe una llamada de teléfono y nos dice que no nos pueden llevar ya que le han llamado de nuestra agencia, mientras nos hacía el gesto de amenaza con el dedo cortándole el cuello. Llamamos a la policía para intentar solucionar el problema, pero una vez se acercaron pudimos ver como recibían una “comisión” y no nos hacían ni caso. Así que entre incredulidad e indignación nos tuvimos que quedar sin ver Abu Simbel.
Comentar que a medida que van transcurriendo los días el personal se va hartando cada vez más de que le roben el dinero de esta manera, así como del deficiente trato por parte de los guías (en muchas ocasiones ofensivo), de manera que al llegar a El Cairo ya prácticamente nadie contrata las excursiones opcionales, así que aprovechan este primer momento en el que todavía la gente está desorientada para vender las excursiones con las que obtienen mayor margen. Como ejemplo, hicimos la excursión al poblado Nubio por 5 € sin apenas regatear el precio. Así mismo los guías controlan la información en todo momento, y de esta manera pudimos comprobar como otra pareja que conocimos (y que también se vieron involucrados en el incidente), que eran los únicos que no habían contratado el paquete básico tenían serias dificultades para enterarse de los horarios en los que iba a zarpar el barco y así poder organizar su tiempo, ya que su guía desapareció para ellos y no les prestó ningún tipo de ayuda. En general el trato por parte de los guías durante el crucero fue lamentable, con un tono impositivo constante, faltas de respeto, etc., y no solo para nosotros, ya que al final del crucero era una opinión compartida por la gran mayoría de los viajeros.
El último día del crucero nuestro guía nos comenta que si puede hablar con nosotros, y separándonos del grupo nos dice que le tenemos que pagar 40 € de propinas y 35 € por el visado a lo que por supuesto nos negamos a lo que nos dijeron que ya nos las apañaríamos con la agencia cuando llegásemos a El Cairo. Por nosotros perfecto, ya que queríamos trasladarles nuestras reclamaciones. Previamente habíamos leído perfectamente el contrato del viaje, así como la oferta a la que hace referencia y en ningún momento se estipula como obligatoria una cantidad a pagar en concepto de propinas (¿qué sentido tiene entonces que no te la cobren directamente cuando contratas el viaje?, ¿y que a nadie de nuestro viaje la dieran un recibo justificando dicho pago?). No obstante dejamos en la recepción del barco la cantidad recomendada de 2 € por día y dimos las propinas que consideramos convenientes directamente al personal del barco.
Una vez llegamos a El Cairo nos estaba esperando un representante de la agencia (Sr. Taha) que una vez en el autobús nos empezó a hablar despectivamente y sin guardar un mínimo respeto a las personas que le estaban pagando, daba la impresión de que estábamos en el ejercito en lugar de vacaciones (la situación era totalmente surrealista e incluso cómica). Recogió los billetes de avión de todos los pasajeros para confirmar el horario de vuelta (era un vuelo charter). Ya en el hotel se dirigió a nosotros y nos solicitó el pago de las propinas. Le contamos todo lo que había sucedido y que por ese motivo no estábamos dispuestos a darles las propinas y ante nuestra sorpresa nos dice que en ese caso “no íbamos a abandonar su país” y que no nos iban a devolver los billetes, provocando la indignación de algunos de nuestros compañeros de viaje que estaban presentes y que en ese momento nos echaron una mano recriminando al guía y trasladándole sus quejas. La mañana siguiente intentamos contactar telefónicamente con la compañía que nos había vendido el viaje (Muchoviaje.com) pero nos resultó imposible, así que mandamos un correo electrónico pidiéndoles que se pusieran en contacto urgentemente. Al no obtener respuesta tuve que llamar a mi pareja para que se pusiera en contacto con ellos y les contase todo el asunto, y de esta manera finalmente se pusieron en contacto con nosotros para decirnos que no nos preocupásemos, que nos iban a dar los billetes. A la mañana siguiente me dirigí al guía para pedirle los billetes (que hemos pagado y son de nuestra propiedad) y me contesta que están bloqueados por la agencia, con lo que no nos quedó otra opción que acudir a la embajada, ya que al día siguiente salía el avión y en esos momentos nos encontrábamos sin billetes. Al explicarles todo no se podían creer lo que nos estaba sucediendo e inmediatamente se pusieron a llamar a todos los teléfonos de contacto de Image Tours de los que disponíamos para intentar mediar por nuestros billetes, pero no fue hasta por la tarde que pudieron hablar con ellos, y atención a lo que les dijeron: “que al final nos darían los billetes pero que lo hacían para presionar porque no les habíamos dado las propinas. INCREIBLE, le dicen a la embajada que nos están haciendo chantaje!!. Finalmente hasta que no estuvimos en el auto-bus de camino al aeropuerto no nos los devolvieron.
En resumen nos fastidiaron un viaje por el que habíamos pagado, ya que con todos estos problemas es imposible disfrutar del viaje, además del tiempo perdido en realizar todas estas gestiones, la tensión y mal humor acumulado y el dinero gastado en llamadas a España, taxis, etc.
Comentar que el trato recibido en la embajada fue excelente e incluso nos llamaron al día siguiente para ver si todo había ido bien, cosa que no ha hecho la compañía con la que contratamos el viaje.
Me gustaría para terminar animar a toda la gente que se vea en una situación similar a que lo denuncie y tome las medidas oportunas, para conseguir de este modo entre todos terminar con estos abusos.
Un abrazo.
A nuestra llegada al aeropuerto de Aswan nos estaban esperando los representantes de la agencia organizadora del viaje en Egipto (Image Tours) para la tramitación del visado, que consiste literalmente en pegarte en el pasaporte la pegatina del visado, por lo que te cobran 34 €. Nosotros en cambio nos dirigimos a las ventanillas de control de documentación para preguntar donde podíamos obtenerlo y nos indicaron que en la ventanilla del banco, pero al preguntar allí nos decían que no, que no sabían nada, así que continuamos preguntando al personal del aeropuerto, se miraban unos a otros y nadie sabia nada o nos decían que esperásemos a que viniese el responsable pero no venía nadie. Estuvimos a punto de ceder y solicitárselo a nuestro guía, pero finalmente apareció un señor con los visados, por los que nos cobró ¡10 €! (el mismo nos pegó el visado en el pasaporte).
Una vez llegamos al barco lo primero que hicieron fue sentarnos en diferentes mesas formando pequeños grupos para vendernos las excursiones opcionales (en nuestro caso prácticamente todo el grupo había contratado el paquete de excursiones básico de 114 €), explicándonos que para el día siguiente las visitas incluidas nos llevarían únicamente una hora (visita a la Alta Presa y al Obelisco Inacabado, las cuales resultan de escaso interés si lo comparamos con el templo de Philae, acerca del cual no hicieron ni mención), así que para llenar el tiempo libre podíamos hacer las excursiones OPCIONALES a Abu Simbel y visitar un poblado Nubio al precio de 95 € y 35 € respectivamente, pero como nuestra idea era realizar las excursiones por libre le dijimos que estábamos cansados y que de momento no queríamos coger ninguna (la discreción fue absoluta). Después de cenar salimos a dar una vuelta para contratar el viaje a Abu Simbel y aunque las recomendaciones de varias guías indican que es más económico contratarlas en hoteles pequeños, decidimos contratarla en un hotel de lujo para asegurarnos de que tenían los seguros y todo era legal. Aun así nos costó solo 10 € por persona. Cuando nos disponíamos a salir del barco sobre las tres de la mañana (a las cuatro de la mañana sale un convoy policial en el que viajan tanto los viajes organizados como los que lo contratan por libre, con las mismas medidas de seguridad) nos estaba esperando uno de los guías (Sr. Manduh) el cual nos dijo que le teníamos que firmar un papel que había escrito a mano, del cual nos decía que era un documento oficial, sin embargo no tenía una copia para nosotros ni se existía el sello de ningún organismo oficial; era simplemente un folio escrito a mano. Por supuesto nos negamos y cuando hicimos el gesto de salir del barco nos empezó a gritar que no estábamos en nuestro país y que nos olvidásemos de las leyes españolas, que aquí no se podía andar por la calle por la noche ni salir del barco y que si lo hacíamos iba a llamar a la policía. Aún así salimos del barco y cuando íbamos caminando nos pareció que alguien nos seguía por el otro lado de la calle pero no le dimos importancia (no nos imaginábamos lo que iba a pasar) y continuamos hasta el hotel donde nos esperaba la furgoneta que nos tenía que llevar a Abu Simbel. Una vez dentro el conductor recibe una llamada de teléfono y nos dice que no nos pueden llevar ya que le han llamado de nuestra agencia, mientras nos hacía el gesto de amenaza con el dedo cortándole el cuello. Llamamos a la policía para intentar solucionar el problema, pero una vez se acercaron pudimos ver como recibían una “comisión” y no nos hacían ni caso. Así que entre incredulidad e indignación nos tuvimos que quedar sin ver Abu Simbel.
Comentar que a medida que van transcurriendo los días el personal se va hartando cada vez más de que le roben el dinero de esta manera, así como del deficiente trato por parte de los guías (en muchas ocasiones ofensivo), de manera que al llegar a El Cairo ya prácticamente nadie contrata las excursiones opcionales, así que aprovechan este primer momento en el que todavía la gente está desorientada para vender las excursiones con las que obtienen mayor margen. Como ejemplo, hicimos la excursión al poblado Nubio por 5 € sin apenas regatear el precio. Así mismo los guías controlan la información en todo momento, y de esta manera pudimos comprobar como otra pareja que conocimos (y que también se vieron involucrados en el incidente), que eran los únicos que no habían contratado el paquete básico tenían serias dificultades para enterarse de los horarios en los que iba a zarpar el barco y así poder organizar su tiempo, ya que su guía desapareció para ellos y no les prestó ningún tipo de ayuda. En general el trato por parte de los guías durante el crucero fue lamentable, con un tono impositivo constante, faltas de respeto, etc., y no solo para nosotros, ya que al final del crucero era una opinión compartida por la gran mayoría de los viajeros.
El último día del crucero nuestro guía nos comenta que si puede hablar con nosotros, y separándonos del grupo nos dice que le tenemos que pagar 40 € de propinas y 35 € por el visado a lo que por supuesto nos negamos a lo que nos dijeron que ya nos las apañaríamos con la agencia cuando llegásemos a El Cairo. Por nosotros perfecto, ya que queríamos trasladarles nuestras reclamaciones. Previamente habíamos leído perfectamente el contrato del viaje, así como la oferta a la que hace referencia y en ningún momento se estipula como obligatoria una cantidad a pagar en concepto de propinas (¿qué sentido tiene entonces que no te la cobren directamente cuando contratas el viaje?, ¿y que a nadie de nuestro viaje la dieran un recibo justificando dicho pago?). No obstante dejamos en la recepción del barco la cantidad recomendada de 2 € por día y dimos las propinas que consideramos convenientes directamente al personal del barco.
Una vez llegamos a El Cairo nos estaba esperando un representante de la agencia (Sr. Taha) que una vez en el autobús nos empezó a hablar despectivamente y sin guardar un mínimo respeto a las personas que le estaban pagando, daba la impresión de que estábamos en el ejercito en lugar de vacaciones (la situación era totalmente surrealista e incluso cómica). Recogió los billetes de avión de todos los pasajeros para confirmar el horario de vuelta (era un vuelo charter). Ya en el hotel se dirigió a nosotros y nos solicitó el pago de las propinas. Le contamos todo lo que había sucedido y que por ese motivo no estábamos dispuestos a darles las propinas y ante nuestra sorpresa nos dice que en ese caso “no íbamos a abandonar su país” y que no nos iban a devolver los billetes, provocando la indignación de algunos de nuestros compañeros de viaje que estaban presentes y que en ese momento nos echaron una mano recriminando al guía y trasladándole sus quejas. La mañana siguiente intentamos contactar telefónicamente con la compañía que nos había vendido el viaje (Muchoviaje.com) pero nos resultó imposible, así que mandamos un correo electrónico pidiéndoles que se pusieran en contacto urgentemente. Al no obtener respuesta tuve que llamar a mi pareja para que se pusiera en contacto con ellos y les contase todo el asunto, y de esta manera finalmente se pusieron en contacto con nosotros para decirnos que no nos preocupásemos, que nos iban a dar los billetes. A la mañana siguiente me dirigí al guía para pedirle los billetes (que hemos pagado y son de nuestra propiedad) y me contesta que están bloqueados por la agencia, con lo que no nos quedó otra opción que acudir a la embajada, ya que al día siguiente salía el avión y en esos momentos nos encontrábamos sin billetes. Al explicarles todo no se podían creer lo que nos estaba sucediendo e inmediatamente se pusieron a llamar a todos los teléfonos de contacto de Image Tours de los que disponíamos para intentar mediar por nuestros billetes, pero no fue hasta por la tarde que pudieron hablar con ellos, y atención a lo que les dijeron: “que al final nos darían los billetes pero que lo hacían para presionar porque no les habíamos dado las propinas. INCREIBLE, le dicen a la embajada que nos están haciendo chantaje!!. Finalmente hasta que no estuvimos en el auto-bus de camino al aeropuerto no nos los devolvieron.
En resumen nos fastidiaron un viaje por el que habíamos pagado, ya que con todos estos problemas es imposible disfrutar del viaje, además del tiempo perdido en realizar todas estas gestiones, la tensión y mal humor acumulado y el dinero gastado en llamadas a España, taxis, etc.
Comentar que el trato recibido en la embajada fue excelente e incluso nos llamaron al día siguiente para ver si todo había ido bien, cosa que no ha hecho la compañía con la que contratamos el viaje.
Me gustaría para terminar animar a toda la gente que se vea en una situación similar a que lo denuncie y tome las medidas oportunas, para conseguir de este modo entre todos terminar con estos abusos.
Un abrazo.
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